Encaramos la segunda semana, con las pilas cargadas, tras el descanso del fin de semana. Todos manifestamos gran alegría con el reencuentro, lo cual es buena señal; la comunidad va creando vínculos de afecto.
La reunión del lunes por la tarde trató los últimos detalles sobre organización de la vida comunitaria: Comisión de oración y liturgia y Comisión de vida comunitaria. Compartimos dulces de Tenerife durante el tiempo del café. En la misma tarde, las Hermanas María de Jesús y Karina, nos dieron a conocer la Congregación de Hermanas Guadalupanas de La Salle, a la que ellas pertenecen. En una presentación pudimos conocer sobre su fundador, el Hno. Juan Fromental y sobre la obra que llevan a cabo en distintos lugares.