En 1789, al regreso a Madrid del pintor tras el destierro al que le sometió Carlos III por hacer determinados favores a don Luis de Borbón, intentó abrirse camino con géneros que, como el vedutismo, tenían un gran éxito de ventas. Las 'vedute' eran vistas urbanas, de las que se hacían varias versiones, para lograr una comercialización óptima, a modo de las modernas tarjetas postales.
Día festivo en la Puerta del Sol de Madrid en el XVIII
Puerta del Sol de Madrid.
La iglesia de Nuestra Señora del Buen Suceso, conocida como Iglesia del Buen Suceso, era una pequeña iglesia en la parte oriental de la Puerta del Sol madrileña.  La Iglesia procedía de una remodelación del Hospital Real de la Corte, construido en 1483. Hizo las funciones de iglesia y hospital desde 1590. A la derecha el Convento de Nuestra Señora de las Victorias. Todo fue demolido a comienzos de 1854, tras la desamortización de Mendizábal. Después de esta fecha el solar fue ocupado por el Hotel París y hoy día este edificio, en proceso de remodelación, es recordado por el cartel publicitario del Tío Pepe. En la plaza también se ve la fuente de Mariblanca, nombre popular con el que se designa a la pequeña Venus de mármol blanco de origen italiano que estuvo en lo alto de la Fuente de la Fe o de las Arpías, en este lugar.
El Jardín Botánico desde el paseo del Prado
De El Jardín Botánico desde el Paseo del Prado (h. 1790) existen al menos seis réplicas, con muy escasas variaciones. En esta obra Paret se aleja de las complicadas perspectivas del rococó y asume el neoclasicismo, como se desprende de la severa composición horizontal adoptada, que queda remarcada por el trazado clasicista de la Puerta Real, el primer acceso que tuvo el Botánico.

Ensayo de una comedia

Juramento de Fernando VII como príncipe de Asturias

Representación de dos instantes consecutivos en la ceremonia de juramento del futuro Fernando VII (1784-1833) como príncipe de Asturias, en la Iglesia del Real Monasterio de San Jerónimo de Madrid el 23 de Septiembre de 1789: el juramento religioso como sucesor de la Corona y el momento en el que besa la mano de su padre el Rey. En la escena, puede distinguirse al Príncipe arrodillado delante del cardenal Lorenzana y ante su padre Carlos IV, situado junto a la reina María Luisa de Parma bajo el dosel de la derecha. A pesar de las grandes dimensiones de la obra, Paret supo recrear el momento con gran detallismo, tanto pictórico como histórico.